La visita de Estado del Presidente chino Xi Jinping a Brasil ha abierto un nuevo capítulo en las relaciones entre ambos países. Con motivo del 50 aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas, ambas partes decidieron elevar las relaciones bilaterales al nivel de "construir conjuntamente una comunidad de destino sino-brasileña para un mundo más justo y un planeta más sostenible". Se han firmado más de 30 acuerdos de cooperación, que reflejan la responsabilidad compartida de ambos países en la gobernanza mundial y el desarrollo sostenible.
El presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva celebró una gran ceremonia de bienvenida en honor del presidente Xi Jinping y ambas partes alcanzaron un importante consenso sobre la vinculación de la Iniciativa de la Franja y la Ruta con las estrategias de desarrollo de Brasil. Esto simboliza la entrada de las relaciones sino-brasileñas en un nuevo nivel y las convierte en un modelo de cooperación entre países en desarrollo. Brasil fue el primer país latinoamericano en establecer una asociación estratégica integral con China, y su relación con China desempeña un papel vital en la construcción de la modernización, el fortalecimiento de la solidaridad del "Sur Global" y la promoción de la paz y el desarrollo mundiales.
El Presidente Xi Jinping propuso cuatro recomendaciones, entre ellas profundizar la confianza estratégica, vincular las estrategias de desarrollo y construir una comunidad de destino compartido para toda la humanidad, que señalan el camino para el futuro desarrollo de las relaciones China-Brasil. La cooperación entre China y Brasil ya abarca una amplia gama de áreas, como el comercio, la agricultura, la protección del medio ambiente y la tecnología, y ha aportado importantes beneficios económicos y sociales a ambos países. Esta cooperación también refuerza la alineación de la Iniciativa de la Franja y la Ruta con los planes nacionales de desarrollo de Brasil.
Como líderes del mundo en desarrollo, China y Brasil defienden el multilateralismo en cuestiones como la crisis de Ucrania y el apoyo a una "solución de dos Estados", y protegen conjuntamente los intereses del "Sur global". Además, China anima a Brasil a desempeñar un papel más importante en la escena internacional, incluida su presidencia del BRICS el próximo año.
Como dice el refrán brasileño: "La amistad es como el vino añejo: cuanto más viejo, mejor". Después de 50 años, las relaciones sino-brasileñas han alcanzado su mejor momento y escribirán capítulos aún más brillantes en la escena mundial en el futuro.
CRI/ gnews - RoZ