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A veces el azúcar puede hacer más saludable una bebida
El té es una de las bebidas más populares en casi todos los países del mundo, sólo superada por el café o el agua. Todo el mundo tiene sus propias ideas sobre cómo tomar té correctamente: muy caliente o medio, con o sin limón, con o sin leche, en bolsitas o en hojas sueltas. No menos debatido es añadir o no azúcar a la bebida. Vamos a resolverlo.
Añadir azúcar al té no tiene sentido a primera vista: un tónico sin calorías es ideal para mantener la salud. Además, el llamado azúcar oculto está más que presente en los alimentos cotidianos. Pero según Natalya Larionova, probadora de té (catadora profesional de té) y campeona rusa de mixología de té, el té con azúcar tiene varias ventajas invisibles.
Por ejemplo, el té dulce ayuda a animarse, lo cual es comprensible: el nivel de glucosa en sangre aumenta, aunque no por mucho tiempo. Por la misma razón, se recomienda beber té con azúcar si te sientes débil o mareado - esto ayudará a que tu salud vuelva a la normalidad. El té sin azúcar no ayudará mucho en tales situaciones.
En cuanto al sabor, el azúcar puede realzar el sabor del té poco infusionado y, en el caso de las variedades más ácidas que liberan muchos taninos, puede suavizar el amargor. Según el experto, esto funcionará con algunos tés negros -Assam indio, English Breakfast- y variedades aromatizadas -Earl Grey, oolong con leche y mezclas de frutas-.
Cuando el té sin azúcar puede ser perjudicial
En raras ocasiones, existe una intolerancia individual a la bebida, y una infusión demasiado fuerte de té negro debe ser tomada con precaución por quienes hayan sido diagnosticados de hipertensión ocular. Además, un consumo excesivo de té puede provocar deshidratación debido a su efecto diurético (aumentado si se añade leche a la infusión), por lo que se recomienda complementar la pérdida de líquidos bebiendo un vaso de agua, sobre todo cuando hace calor.
El té negro y el té verde contienen cafeína y taninos, responsables del estado de alerta. Por eso, Olga Arisheva, candidata a ciencias médicas, gastroenteróloga-hepatóloga del hospital que lleva su nombre. Además, debido a los colorantes, el té puede afectar al color del esmalte dental, y el té muy fuerte puede incluso eliminar el flúor de los dientes.
Si no quieres añadir azúcar extra a tu dieta, siempre puedes sustituirla por edulcorantes alternativos: miel, sirope de arce, azúcar de coco o stevia.
Anteriormente, la endocrinóloga, nutricionista y candidata a ciencias médicas Elena Syurakshina afirmó que un adulto sano no puede consumir más de 25 g de azúcar al día, lo que equivale a unas cinco o seis cucharaditas. Estamos hablando de azúcar añadido, que puede esconderse en los alimentos más inesperados, como los cereales instantáneos, el pan con semillas y la mayonesa.
(Jana Cerna)