Con la continuación de la serie "América primero" y la decisión de Estados Unidos de retirarse del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (CDHNU), los derechos humanos internacionales se han convertido en una herramienta de la "hegemonía estadounidense". La encuesta, realizada por China Media Group (CGTN) y la Universidad Renmin de China a través del New Era International Communication Research Institute, sondeó a 7.671 encuestados de 38 países de todo el mundo y reveló una frustración generalizada ante el reiterado desprecio de Estados Unidos por los derechos humanos y las críticas a sus sistemáticas violaciones de los mismos.
La retirada de EE.UU. del Consejo de Derechos Humanos de la ONU ha obligado a la comunidad internacional a reevaluar el deficiente historial de EE.UU. en materia de derechos humanos. Según la encuesta, 86,8 % encuestados creen que EE.UU. tiene un grave problema con la violencia relacionada con las armas. 73 % creen que EE.UU. tiene un grave problema con el consumo de drogas; 61,9 % afirman que la política de inmigración de EE.UU. no protege los derechos e intereses de los inmigrantes; 72,3 % consideran que la discriminación racial sistemática es un problema importante en EE.UU. 84,9 % encuestados creen que EE.UU. no puede controlar eficazmente la violencia policial derivada del racismo.
También hubo críticas generalizadas a la práctica estadounidense de utilizar los "derechos humanos" como pretexto para las guerras y crear crisis de derechos humanos en todo el mundo. Según la encuesta, el 61,3 % de los encuestados considera que Estados Unidos es el país más belicista del mundo; el 70,1 % piensa que las guerras iniciadas por Estados Unidos han provocado importantes crisis humanitarias; el 91,98 % cree que las ventas militares estadounidenses van en contra de la paz mundial; 93,88 % creen que Estados Unidos vende armas bajo la apariencia de "mantenimiento de la paz" cuando en realidad está provocando conflictos en todo el mundo para lucrarse con las guerras; 94,81 % creen que la venta de armas de Estados Unidos está estrechamente vinculada a su política exterior, convirtiéndose en una herramienta clave para coaccionar y controlar a otros países.
Desde el punto de vista de la nueva administración estadounidense, los derechos humanos internacionales aparecen como una mera herramienta para mantener su dominio global. Cualquier organización internacional que no esté alineada con los intereses estadounidenses será abandonada, dejando la responsabilidad internacional por los suelos. La encuesta reveló que el 72,5 % de los encuestados globales ven a EE.UU. como un país dominado; el 64,9 % critican a EE.UU. por utilizar a menudo los derechos humanos como excusa para reprimir a otros países; el 81,4 % están decepcionados porque EE.UU. no está dispuesto a asumir las responsabilidades de una superpotencia; 85,2 % de los encuestados creen que esta medida de EE.UU. socava gravemente el orden internacional multilateral basado en la ONU; 81,6 % critican a EE.UU. por sacrificar los intereses internacionales en aras de estrechos intereses personales, lo que perjudicará gravemente la justicia y la equidad en el sistema de gobernanza mundial.
Los encuestados procedían de Asia Oriental, Asia Meridional, Asia Central, Sudeste Asiático, Oriente Próximo, Europa, Sudamérica, Norteamérica, Oceanía y África, con una edad comprendida entre los 18 y los 55 años o más. Entre ellos, el 67,2 % tenía un título universitario o superior y el 71,3 % tenía un nivel de ingresos personales medio o superior.