WASHINGTON - El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado, con efecto inmediato, recortes arancelarios a las importaciones de la mayoría de los países. La nueva medida impone un arancel temporal del diez por ciento durante 90 días. La excepción a esta decisión es China, sobre cuyos bienes se han aumentado los aranceles del 104 al 125 por ciento.
El presidente anunció la decisión en su red social Truth Social, donde dijo que la medida era para promover condiciones comerciales más justas y proteger la economía estadounidense. Más tarde, añadió que Estados Unidos está abierto a acuerdos con cualquier país, incluida China, siempre que sean "justos y equilibrados." "Queremos relaciones comerciales que no sean unilaterales. Cada socio tiene que jugar con las mismas reglas", dijo Trump a los periodistas en Washington. Describió el aumento de los aranceles a los productos chinos como un paso necesario en un esfuerzo a largo plazo para restablecer el equilibrio comercial entre las dos potencias.
El anuncio se produce en un momento de creciente nerviosismo en los mercados mundiales, que reaccionan con sensibilidad a los cambios en la política comercial estadounidense. Los analistas advierten de que este hecho podría afectar no sólo a las relaciones chino-estadounidenses, sino también al entorno comercial mundial en general.
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