foto: un.org
Clima y medio ambiente
Miles de millones de personas se enfrentan a una "epidemia" de calor extremo y a olas de calor cada vez más mortíferas, con temperaturas que superan los 50 grados centígrados. Así lo anunció el Secretario General de la ONU, António Guterres, al presentar su nuevo llamamiento a la acción contra el calor extremo.
Según el responsable de la ONU, los nuevos datos muestran que el domingo, el lunes y el martes pasados fueron los tres días más calurosos de los que se tiene constancia.
El calor extremo destruye economías, aumenta la desigualdad, socava los Objetivos de Desarrollo Sostenible y causa muertes. La Tierra se está convirtiendo en un lugar cada vez más caluroso y peligroso para vivir. El Llamamiento a la Acción es el primero de este tipo que pone de relieve las repercusiones del calor extremo en múltiples sectores, aprovechando los conocimientos especializados de diez entidades especializadas de las Naciones Unidas.
Amenaza de muerte
Junio de 2024 fue el decimotercer mes consecutivo en que se batió un récord de temperatura. El informe del jefe de la ONU advierte de que, si no se toman medidas inmediatas, miles de millones de personas seguirán sufriendo olas de calor cada vez más graves.
El Secretario General señaló que entre las personas más expuestas al aumento de las temperaturas se encuentran las embarazadas, las personas con discapacidades y comorbilidades, los ancianos, los niños, los desplazados y los pobres, que a menudo viven en viviendas inadecuadas sin aire acondicionado.
El estrés por calor es la principal causa de muerte debida a condiciones meteorológicas extremas. Se estima que entre 2000 y 2019 se produjeron aproximadamente 489 000 muertes anuales por causas relacionadas con el calor, de las cuales 45 % en Asia y 36 % en Europa. El número de muertes relacionadas con el calor entre las personas de 65 años o más aumentó aproximadamente un 85% entre 2000-2004 y 2018-2022.
UNICEF: La ola de calor mata a casi 400 niños al año en Europa y Asia Central
Expertos del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) han llegado a la conclusión de que, si se mantienen las condiciones actuales, casi todos los menores de 18 años del mundo -2.200 millones de niños- estarán expuestos a olas de calor en 2050, frente al 24% en 2020.
Impacto en los trabajadores
Más del 70 % de la población activa mundial - 2 400 millones de personas - corre actualmente un alto riesgo de sufrir calor extremo, según nuevos datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
"Encontramos 22,8 millones de lesiones en el lugar de trabajo relacionadas con el calor extremo, casi 19.000 muertes y más de 26 millones de casos de enfermedad renal debidos a la exposición laboral prolongada al calor". afirmó el experto de la OIT Bálint Nafradi.
En 2022, la exposición al calor provocó una pérdida de capacidad laboral y de ingresos potenciales equivalente a 863.000 millones de dólares. Mientras tanto, la OIT estima que cuando las temperaturas diarias superan los 34 grados centígrados, la productividad laboral se reduce en 50 %.
Plan de acción
El jefe de la ONU pide esfuerzos urgentes y concertados para reforzar la cooperación internacional en cuatro áreas críticas.
En primer lugar, todos los países y comunidades deben proteger a los más vulnerables de los efectos del calor extremo, reducir los riesgos y aumentar la resiliencia. La Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Meteorológica Mundial (OMM) estiman que la ampliación de los sistemas de alerta de calor en 57 países podría salvar cerca de 100 000 vidas cada año.
Según Guterres, es necesario mejorar el acceso a la refrigeración con bajas emisiones de carbono, ampliar la refrigeración pasiva, por ejemplo mediante el diseño urbano, así como soluciones más "verdes" y eficientes. El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente calcula que, en conjunto, estas medidas podrían proteger a 3.500 millones de personas de aquí a 2050, al tiempo que se reducirían las emisiones y se ahorraría a los consumidores 1 billón de dólares al año, dijo el responsable de la ONU.
En segundo lugar, el Secretario General pidió que se proteja a los trabajadores de todos los sectores mediante medidas adecuadas de seguridad y salud en el trabajo basadas en los principios de los derechos humanos. En particular, deben adoptarse medidas urgentes para proteger la salud y la vida de los trabajadores de todas las regiones del mundo frente al riesgo del calor extremo.
Además, la ONU hace un llamamiento a todos los países y comunidades para que formen asociaciones sostenibles, multisectoriales y multinivel con el fin de desarrollar y aplicar planes de acción, estrategias y soluciones integradas para aumentar la resiliencia ante los fenómenos meteorológicos.
Por último, el máximo responsable de la ONU reiteró la importancia de acelerar una transición justa para abandonar los combustibles fósiles y aumentar la inversión en energías renovables. En virtud del Acuerdo de París, cada país debe presentar una nueva Contribución Determinada a Nivel Nacional (CDN) con objetivos de reducción de emisiones para principios de 2025.