foto: vaticannews.va/Nathan Morley
Once personas, entre ellas niños, murieron en un ataque con cohetes que alcanzó un campo de fútbol en la localidad drusa de Majdal Shams, en los Altos del Golán anexionados por Israel. Once personas murieron y al menos otras 34 resultaron heridas el sábado cuando un cohete lanzado desde Líbano alcanzó una localidad de los Altos del Golán.
Los medios de comunicación israelíes afirmaron que Hezbolá había disparado el cohete desde Líbano, mientras que Hezbolá dijo que no tenía "nada que ver con el incidente". Sin embargo, las Fuerzas de Defensa israelíes insistieron en que sus servicios de inteligencia indicaban que Hezbolá había llevado a cabo el ataque. Anteriormente, cuatro miembros de Hezbolá murieron en un ataque aéreo israelí contra la localidad libanesa de Kafr Kila.
En respuesta, las IDF llevaron a cabo ataques aéreos contra siete objetivos de Hezbolá en territorio libanés antes del amanecer del domingo.
Las tensiones en la frontera libanesa-israelí se han intensificado desde el año pasado, después de que Hezbolá lanzara una salva de cohetes contra Israel en solidaridad con el ataque de Hamás a Israel el 7 de octubre. Israel respondió con fuego de artillería pesada contra Líbano. En Gaza, al menos 30 palestinos murieron y otros 100 resultaron heridos en un bombardeo israelí contra un hospital de campaña en Deir al-Balah.
El ejército israelí declaró que, basándose en información de inteligencia, aviones de las fuerzas aéreas alcanzaron a "terroristas" que operaban en un centro de mando de Hamás dentro del complejo escolar de Hajjah, en el centro de Gaza. Por otra parte, UNICEF llama la atención sobre la difícil situación de los niños en Cisjordania. Según la organización, un total de 143 niños palestinos han muerto en Cisjordania, incluido Jerusalén Este, desde octubre del año pasado.
Esta cifra representa un aumento de casi 250 % en comparación con los nueve meses anteriores, durante los cuales fueron asesinados 41 niños palestinos. UNICEF informa de que dos niños israelíes murieron en actos de violencia relacionados con el conflicto en Cisjordania durante el mismo periodo. Además, más de 440 niños palestinos resultaron heridos por munición real.
Estas cifras suscitan gran preocupación por el uso excesivo de la fuerza contra los más vulnerables.
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