El informe de hoy sobre el PIB muestra lo lejos que hemos llegado desde que tomé posesión: de la peor crisis económica desde la Gran Depresión a la economía más fuerte del mundo. Desde que tomé posesión, la economía ha crecido un 12,6 %, tenemos la tasa media de desempleo más baja de los últimos 50 años, se han creado 16 millones de puestos de trabajo y los ingresos han crecido 4.000 dólares más que la inflación. Los críticos pensaban que necesitaríamos una recesión para reducir la inflación, pero en lugar de eso hemos crecido a una media de 3 % al año, mientras la inflación caía hasta justo antes de la pandemia.
Debemos seguir construyendo sobre este progreso. En cambio, los republicanos del Congreso proponen aranceles generalizados que costarían a las familias casi 4 000 dólares al año, reavivarían la inflación y destruirían cientos de miles de puestos de trabajo. La Vicepresidenta y yo estamos luchando por reducir el coste de los bienes cotidianos -desde la vivienda y los alimentos hasta la asistencia sanitaria y la atención infantil-, mientras que los republicanos luchan por más exenciones fiscales para los ricos y las grandes empresas. La mejor forma de hacer crecer la economía es desde el centro hacia fuera y desde abajo hacia arriba, no desde arriba hacia abajo.
Whitehouse/ gnews - RoZ